El glucómetro, tu fiel amigo
Cuando empiezas en el mundillo de las hipoglucemias una de las primeras cosas que deberían decirte es te presento al glucómetro, a partir de ahora va a ser tu fiel amigo.
Y es verdad, porque a partir de ese momento debería acompañarte a todas partes.
En el mercado existen muchos tipos de glucómetros distintos, pero antes de que escojas uno, queremos que sepas que hay varias cosas a considerar…
Ten en cuenta
LA PRECISIÓN DE LAS LECTURAS VARÍA DE UN GLUCÓMETRO A OTRO, POR ESO ES IMPORTANTE ESCOGERLO A CONCIENCIA
Algunos elementos que podrías considerar son la velocidad en mostrar el resultado, el tamaño del aparato, el coste de las tiras reactivas o su facilidad de manejo.
Sin embargo, el factor decisivo debería ser LA PRECISIÓN.
Verás, resulta que los medidores de glucosa que hay en el mercado tienen una precisión variable que puede ir hasta el 20% de desviación o ±15 mg/dl en valores por debajo de 60mg/dl. Y claro, ¡¡no tiene nada que ver un 50mg/dl con un 35mg/dl!!
Además, piensa que estos criterios de precisión se rigen por criterios estándar.
Es decir, en condiciones en las que el medidor, las tiras y la muestra de sangre se manejan siguiendo las recomendaciones exactas de cada fabricante.
Dado que los datos del glucómetro van a condicionar las actuaciones posteriores, es imprescindible que puedas confiar en tu aparato.
Si tienes dudas sobre su uso o sobre que dispositivo se adaptaría mejor a vosotros, seguramente vuestro hospital dispondrá de un asesor en diabetes ¡Y os podrá ayudar!
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¿Y cómo se hace una glucemia?
Necesitas un glucómetro, una tira reactiva y un dispositivo pinchador. También una gasa o un pañuelo de papel por si la gota sale muy grande.
Si quieres, también puedes tener una libreta y un boli para apuntar el resultado. Sin embargo, no es necesario que registres les datos al momento porque el dispositivo almacena las mediciones de bastantes días.
Hay que seguir unos sencillos pasos:
¿Cómo se administra?
Prepara todos los utensilios que vas a necesitar. En especial: glucómetro, dispositivo pinchador y una tira reactiva limpia.
Lava bien las manos con agua y jabón o, en su defecto, limpia la zona del dedo de donde vayas a sacar la gota con una gasa o algodón mojado en solución jabonosa o desinfectante. Recuerda secar bien después.
Pon la tira reactiva en la ranura del glucómetro hasta que haga contacto e indique que está listo para recibir la muestra (suele aparecer el dibujo de una gota parpadeando).
Utiliza el pinchador para obtener la gota de sangre: Pon una lanceta limpia, verifica la profundidad del pinchazo, carga el lápiz y pincha para que salga una gota.
Toca la gota con la tira y espera a que esta absorba la cantidad de sangre necesaria (suele aparecer una cuenta atrás, empezando por el 5). Recuerda: No separes la tira de la gota hasta que se haya absorbido porque de lo contrario dará error.
Cuando tengas el resultado puedes retirar y desechar la tira. Si lo deseas, apunta el resultado en un cuaderno.
